ESTE SOY YO

Ventana abierta, sí, para ver y saludar a la gente que pasa, para poder decirles algo. Abierta también a todo el mundo, a la madre tierra que es tan bella. Abierta al cambio, a nuevas ideas, a la tristeza de tantos hermanos, a los desastres, a las tragedias humanas, a todo... y como yo no puedo con todo... ventana abierta a la sonrisa paternal de Dios Padre que todo lo sabe, que todo lo cuida, que todo lo va llevando a la perfección desde su creación, desde la eternidad aunque a veces me parezca tan ausente. Por eso quiero dejarle la ventana abierta para que entre Él, para que me siga recordando que es Él quien le da solidez y consistencia a mi ser. Le dejo mi ventana abierta para que entre en mi corazón y en mi cabeza y deje en mi la alegría y la certeza de saber que esta más dentro de mí que yo mismo.

Tengo 76 años, una preciosa mujer y tres hijos maravillosos: Lo digo así sin darle más vueltas ni pedir discupas por mi falta de modestia. Es que veo en ellos la mano amorosa del Padre que ha puesto en ellos su bondad como la ha puesto en todo lo creado.

Vivo en Arafo, un pueblecito de casi 6.000 habitantes recostado en las faldas de los montes centrales de Tenerife, mirando al este y al mar.

Estoy jubilado pero trabajo: doy clases particulares de inglés y casi todas las asignaturas de secundaria: gran parte de mi vida la he dedicado a la enseñanza y me encanta. Mi mujer y mi hija más pequeña Isabel también dan clases y entre los tres y con una pequeña pensión que nos llega desde la Seguridad Social juntamos lo suficiente para pagar el alquiler de la vivienda y demás gastos. Isabel estudia 1º de Bachillerato y nos ayuda por las tardes cuando vuelve de clases. Tambien hacemos traducciones.

Esto no ha sido más que abrir la ventana y ahí se queda abierta por si alguien quiere pasar y llamar. Saludos cariñosos a todos los que paséis cerca de mi ventana.